jueves, 14 de marzo de 2013

EL MEJOR PESCADOR Y PADRE

 


Érase una vez un hombre llamado Joaquín, su mujer Lucía y su hijo Pedro. Un día el jefe del puerto de Motril le mando un e-mail diciendo: la semana que viene, tenemos que ir a pescar con los demás hombres.

Joaquín no le gustaba la idea, él quería quedarse en el puerto con su familia. Fue a ver al jefe que estaba en su despacho.
- Tengo que quedarme con mi familia, Pedro está malo y le tienen que operar.

Pero el jefe le respondió diciéndole, le diré a los médicos que si pueden operarle mañana, esque usted es el mejor pescador.

Cuando llegó a su casa le dijo a Pedro que mañana le tenían que operar. El niño se puso contento porque ya no aguantaba más el dolor, pero cuando le dijo que se iba a pescar, se puso a llorar.

El padre quería quedarse pero no podía. Llegó el día, Pedro estaba en el quirófano y al cabo de unas horas salió y le dieron el alta.

Todos los días jugaban Lucía, Pedro y Joaquín, hasta que se tuvo que ir. Todas las familias veían como salían del puerto, Pedro llorando porque no podía jugar a fútbol en la placeta, ni pescar con su barca.

Embarcaron y todas las noches Joaquín rezaba por su hijo y soñaba en que estaba en el puerto de Motril.

A los días de la salida el barco paró y el jefe ordenó que sacaran las cañas de pescar y las redes.

Al final de el día habían pescado 500k de pescado, día tras día igual hasta que el jefe le informó a Joaquín que su hijo había recaído de la enfermedad. Él espero a por la noche y cogió una barca camino al puerto de Motril.

No se dió cuenta de que esa noche habían muchas olas y se movía mucho la barca. Tras varios días en el mar llegó y fue corriendo al hospital para ver a su hijo. Estaba tumbado en la cama, el médico lo dijo que Pedro nada más podría vivir con máquinas. Joaquín no le gustaba lo que decía el médico y le preguntó que si podría vivir de otra manera.

El médico le respondió sí, pero con una cantidad de dinero elevada. Joaquín exclamó, ¿mientras viva en el puerto, haré todo lo que sea por Pedro!

Le pagó ese dinero y vivieron felices en el puerto de Motril.